¿Alguna vez has visto este pequeño agujero en las inmediaciones de una oreja, incluso la tuya? Se conoce como seno preauricular y aunque usualmente se define como una “malformación congénita” no hay motivos para alarmarse. A pesar de que la proporción de personas que nacen con esta especie de hoyuelo sea bastante reducida, el único problema que podría ocasionar es la aparición de infecciones que pueden tratarse.
Estos hoyos suelen ubicarse en la conexión entre el cartílago de la oreja y el rostro.
Esta malformación fue descrita en 1864 por la Biblioteca Nacional de los Estados Unidos.
Los agujeros son hereditarios y aparecen durante las primeras etapas del desarrollo fetal.
De acuerdo con el medio británico Metro, tan sólo el 1% de las personas en el Reino Unido nacen con esta característica, aunque el promedio mundial podría acercarse al 10%.
En la cultura etíope se creía que nacer con este agujero podría ser símbolo riqueza.
Un reporte de Business Insider cita al biólogo evolucionista Neil Shubin, quien afirma que podría tratarse de una reminiscencia de las branquias.
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